A finales de 2020 arrancaba el proyecto internacional Novaterra gracias al cual, por medio de una serie de casos de estudio en olivares y viñedos mediterráneos, se desarrollarán nuevas estrategias sostenibles e integradas con el fin de eliminar o reducir significativamente el uso de pesticidas y su impacto en el medioambiente.

Este nuevo proyecto de investigación e innovación, liderado por el Institut de Recerca i Tecnologia Agroalimentàries (IRTA), nace en un contexto en el que “los fitosanitarios más controvertidos están destinados a desparecer de acuerdo a normativas europeas  y es necesario preparar nuevas estrategias de Gestión Integrada de Plagas que sean sostenibles y más respetuosas con la salud del medioambiente, los agricultores y los consumidores”, tal como afirma Felicidad de Herralde, coordinadora de Novaterra.

Para su ejecución, el IRTA trabajará durante los próximos 4 años de la mano de otras 22 entidades, entre las que se encuentra la Plataforma Tecnológica del Vino al frente de la comunicación y difusión del proyecto en España.

Expertos de 6 países (España, Portugal, Francia, Italia, Grecia y Bélgica) suman así esfuerzos para demostrar que, “el objetivo de reducción del 50% de la cantidad de productos fitosanitarios, establecido por la Estrategia de la Granja a la Mesa, puede ser alcanzado combinando nuevas tecnologías y buenas habilidades educativas, sin comprometer la eficacia del proceso”, según afirma el investigador de la UPC, Francisco García Ruiz, que lidera una de las actividades técnicas del proyecto Novaterra.

Para ello, Novaterra cuenta con un presupuesto de más de 5,5 millones de euros y ha recibido una ayuda de más de 4,8 millones de euros por parte de la Comisión Europea, a través del programa Horizon 2020 (GA num. 101000554)