La Comisión Europea apuesta por poner fin a la castración quirúrgica de los cerdos

La Comisión Europea ha publicado un documento dirigido a ganaderos, mataderos, empresas transformadoras de alimentos, minoristas y operadores de servicios de catering y restauración con el título de ‘Poner fin a la castración quirúrgica’, en el que apuesta por acabar con esta técnica en el sector porcino.

Fecha: 31-May-2021

Fuente: Interempresas

Según este documento, las alternativas que pueden realizarse, con el objetivo de salvaguardar el bienestar animal, son criar machos enteros o vacunar contra el olor sexual.

Según la CE, poner fin a la castración quirúrgica tiene ventajas en una serie de ámbitos:

  • Bienestar. Sin dolor, hay menos estrés. La conducta sexual y la agresividad se reducen en los cerdos inmunocastrados. Sin intervenciones, no hay riesgo de infección, lo que conlleva una mejora en la salud. El crecimiento es más rápido en los animales inmunocastrados.
  • Eficacia nutritiva. Mejor índice de transformación del alimento en machos enteros. Los ajustes en la composición del pienso pueden introducirse con rapidez.
  • Medio ambiente. Se necesita menos pienso y se genera menos estiércol.
  • Percepción y aceptación. Las prácticas más humanas y menos invasivas reducen la preocupación por el bienestar animal. Se reducen prácticas que requieren mucha mano de obra. Normalmente sólo se requieren dos vacunas para la inmunocastración.
  • Calidad. Una vacunación temprana potencia la grasa intramuscular y la deposición de grasa dorsal, tan apreciadas en algunos mercados. La carne de cerdos inmunocastrados puede consumirse de forma segura en cualquier momento tras la vacunación.
  • Producción. Buena relación coste-beneficio: el mejor rendimiento de los animales compensa el coste de la inmunocastración.