Investigadores alemanes decodifican el genoma de la patata

Investigadores de la Universidad Ludwig Maximilian de Múnich y del Instituto Max Planck para la Investigación en Fitomejoramiento de Colonia en Alemania han descifrado por primera vez el genoma completo de la patata. Los investigadores, dirigidos por el genetista Korbinian Schneeberger del Instituto Max Planck, han logrado ensamblar el primer genoma completo de la patata, un avance que allana el camino para cultivar nuevas variedades mejoradas.

Fecha: 18-Mar-2022

Tags: genoma

“Las patatas se están convirtiendo cada vez más en parte de la nutrición básica en todo el mundo”, explica Schneeberger. Además explicó que incluso en países asiáticos como China, donde el arroz es el alimento básico tradicional, la patata está ganando terreno. Este nuevo conocimiento puede respaldar el mejoramiento basado en el genoma de nuevas variedades de patata que son más productivas y resistentes al cambio climático, lo que tendrá un gran impacto en la seguridad alimentaria mundial en las próximas décadas.

La patata tiene poca diversidad y es muy probable cualquier patata que compremos hoy en una frutería sea de una variedad que existía hace más de 100 años. La baja diversidad siempre ha hecho que las plantas de patata sean susceptibles a las enfermedades, como fue evidente durante la hambruna irlandesa en la década de 1840. Reconstruir el genoma de la patata ha supuesto un desafío técnico mucho mayor que el del genoma humano porque la patata hereda dos copias de cada cromosoma de cada progenitor. Cuatro copias de cada cromosoma significan cuatro copias de cada gen, lo que hace que la creación de nuevas variedades con la combinación deseada de rasgos individuales sea muy difícil y requiera mucho tiempo.

Schneeberger y compañía evitaron este problema al no usar el ADN tomado del tejido de la hoja, sino analizando los genomas de las células de polen individuales. A diferencia de otras, cada célula de polen contiene solo dos copias de cada cromosoma, lo que facilita la reconstrucción del genoma. Con la nueva información, los investigadores ahora pueden identificar fácilmente las variantes genéticas que son responsables de los rasgos deseados.