Este lunes, el Departamento de Agricultura de EEUU (USDA) publicó una Evaluación general del papel de la agricultura y la silvicultura en los mercados de carbono de EEUU, una mirada integral a la actividad actual del mercado y las barreras a la participación y oportunidades para mejorar el acceso a los mercados de carbono para agricultores y propietarios de tierras forestales. El informe es el primero de los resultados del USDA en virtud de la Ley de Soluciones Climáticas en Crecimiento (GCSA, por sus siglas en inglés), que se convirtió en ley el 29 de diciembre de 2022, como parte de la Ley de Asignaciones Consolidadas de 2023.

 

“La Administración Biden-Harris está trabajando agresivamente para garantizar que los agricultores, ganaderos, propietarios de bosques y comunidades tribales tengan oportunidades de ser parte de la solución al cambio climático, al mismo tiempo que cultivan nuevas fuentes de ingresos y fomentan la inversión en las comunidades rurales”, dijo el Secretario de Agricultura, Tom Vilsack. "Este informe histórico demuestra tanto el potencial como los desafíos que presentan los mercados de carbono para la agricultura y la silvicultura".

 

Como parte de un esfuerzo más amplio para combatir el cambio climático, los mercados de carbono ofrecen una herramienta prometedora para lograr emisiones netas cero. Los agricultores, ganaderos y propietarios de tierras forestales pueden generar créditos de carbono adoptando prácticas para reducir las emisiones o secuestrar carbono en sus tierras, y los mercados de carbono pueden brindarles nuevas oportunidades de ingresos a través de la venta de créditos de carbono. La compra de estos créditos de carbono también puede ayudar a las empresas a alcanzar objetivos voluntarios de reducción de gases de efecto invernadero.

 

El informe de este lunes identifica una variedad de barreras que han obstaculizado la participación de la agricultura en estos mercados. Entre otras cosas, los agricultores enfrentan retornos de inversión limitados debido a los altos costos de transacción en los mercados de carbono, incluidos los costos de cuantificación, verificación y presentación de informes de gases de efecto invernadero. Sin embargo, una evaluación clara de estas barreras brinda a las agencias federales, científicos, agricultores y otros socios información valiosa sobre qué tipos de soluciones pueden facilitar una participación mayor y más beneficiosa de los agricultores.

 

El USDA está analizando detenidamente cómo fomentar una mayor confianza y la participación de los propietarios de tierras en los mercados de carbono. Garantizar que los beneficios climáticos representados en estas transacciones sean creíbles y estén respaldados por ciencia sólida es esencial para que los mercados de carbono funcionen. A principios de este año, el USDA también anunció la inversión de 300 millones de dólares a través de la agenda Invertir en Estados Unidos del presidente Biden para mejorar la medición, el seguimiento, la presentación de informes y la verificación de las emisiones de gases de efecto invernadero y el secuestro de carbono en la agricultura y la silvicultura climáticamente inteligentes. Este trabajo es fundamental para mejorar la implementación de actividades de conservación climáticamente inteligentes, así como para fortalecer las oportunidades del mercado de carbono.

 

Tras la publicación de la evaluación, el siguiente paso en la implementación de la GCSA es que el USDA tome una determinación sobre si se debe establecer el Programa de Proveedores de Asistencia Técnica y Verificadores Externos de Gases de Efecto Invernadero, lo que facilitaría una mejor asistencia técnica a los productores interesados en participar en los mercados de carbono, así como un proceso para registrar verificadores de mercado.

 

Este informe se basa y complementa otros componentes del trabajo de la Administración Biden-Harris para ayudar a los agricultores a mitigar el cambio climático y mejorar la resiliencia de sus operaciones, al mismo tiempo que capitaliza la demanda de productos agrícolas climáticamente inteligentes.

 

El USDA también informó recientemente sobre la rápida implementación de la Ley de Reducción de la Inflación del presidente Biden, que es la mayor inversión jamás realizada por el país para combatir el cambio climático. La Ley de Reducción de la Inflación puso a disposición casi 20.000 millones de dólares en cinco años para algunos de los programas de conservación más populares del USDA, y el USDA ha recibido tres veces la demanda de financiamiento para el año fiscal 2023. Como resultado de las históricas inversiones climáticas realizadas por la Ley de Reducción de la Inflación, el USDA también anunció la financiación de un nuevo programa para ayudar a los propietarios de tierras forestales desatendidos y de pequeñas superficies a conectarse a los mercados voluntarios de carbono emergentes en agosto de 2023.

 

El USDA toca las vidas de todos los estadounidenses cada día de muchas maneras positivas. Bajo la Administración Biden-Harris, el USDA está transformando el sistema alimentario de Estados Unidos con un mayor enfoque en una producción de alimentos local y regional más resiliente, mercados más justos para todos los productores, garantizando el acceso a alimentos seguros, saludables y nutritivos en todas las comunidades, construyendo nuevos mercados y flujos de ingresos para agricultores y productores que utilizan prácticas alimentarias y forestales climáticamente inteligentes, realizando inversiones históricas en infraestructura y capacidades de energía limpia en las zonas rurales de Estados Unidos, y comprometiéndose con la equidad en todo el Departamento eliminando barreras sistémicas y creando una fuerza laboral más representativa de Estados Unidos. 

 

El USDA es un proveedor, empleador y proveedor de igualdad de oportunidades.