Todas las naciones productoras clave han registrado un crecimiento significativo de los precios del porcino en comparación con el comienzo de 2023, con la excepción de Dinamarca, donde los descensos de precios en enero son iguales a los aumentos de precios registrados durante febrero y marzo. Francia y España han registrado el mayor crecimiento, con subidas de precios del orden de 0,45 €/kg en las 12 semanas transcurridas. Los Países Bajos, Alemania y Bélgica han registrado un crecimiento de casi 0,34 euros/kg, mientras que Polonia ha subido 0,26 €/kg.

Los últimos datos de producción de la UE muestran que en enero se sacrificaron un total de 19,74 millones de cerdos, lo que supone un descenso interanual de casi 1 millón de cabezas. En 2022 se registraron los volúmenes de sacrificio más bajos en casi una década en la UE y se prevé que la producción descienda otro 5% en 2023, lo que podría mantener los precios si la demanda se mantiene estable.