El ITACyL publica la evaluación de nuevas variedades de colza en Castilla y León durante la campaña 22/23

El Instituto Tecnológico Agrario (ITACyL) publica la evaluación de nuevas variedades de colza en Castilla y León durante la campaña 22/23

Fecha: 18-Sep-2023

Tags: itacyl

En septiembre de 2022, la campaña de colza comenzó con menos expectativas que en la campaña anterior, donde se había conseguido la mayor superficie de este cultivo tanto en España como en Castilla y León.

La incertidumbre de precipitaciones en la siembra hizo que se redujera un poco la superficie. Según datos PAC, se sembraron en Castilla y León 46.184 ha, un poco por debajo de la 47.950 ha de la anterior campaña. En el resto de España, la superficie pasó de 125.164 ha en 2022 a las 117.100 ha de este 2023.

Los precios se mantienen en un nivel que se podría catalogar de aceptables y sobre todo hay una gran demanda de la paja de colza, con buenos precios, lo que hace que se consiga un valor añadido a este cultivo.

La producción mundial de colza superó los 76 Mt en la campaña 22/23, casi 10 Mt más que en la campaña precedente, donde hubo un verano (2021) tórrido en Canadá, que ocasionó un importante descenso de la producción. En la Unión Europea hubo una producción récord que, junto con una más que aceptable cosecha canadiense, han servido para recuperar los stocks globales de esta semilla oleaginosa.

Los países productores más importantes son:

    1. Unión Europea: 19.500.000 tm.
    2. Canada: 19.000.000 tm.
    3. China: 14.700.000 tm.

 

    1. India: 11.000.000 tm.
    2. Australia: 7.300.000 tm.
    3. Rusia: 3.900.000 tm.

 

  1. Ucrania: 3.200.000 tm.
  2. Estados Unidos: 1.797.000 tm.

Para esta próxima campaña, las perspectivas en cuanto a precio parecen optimistas, debido sobre todo a la sequía que ha habido en Argentina, con una disminución de la producción de soja, lo que ocasiona una escasez de aceites vegetales que pueden favorecer a la colza.

La colza como cultivo alternativo al monocultivo de cereal, se está consolidando en un gran número de explotaciones de Castilla y León, principalmente por la introducción de innovaciones en su agronomía (fertilización, control de plagas y enfermedades, tratamiento de malas hierbas), así como por la aparición de nuevas variedades, más productivas y resistentes a la dehiscencia y al encamado, una mayor calidad y cantidad en el contenido de grasa. Mereciendo un apartado especial las
variedades resistentes a herbicidas, conocidas como variedades Clearfield.