En una entrevista publicada en el New York Times, Pollan apunta que “los predictores de una muerte por Covid son esencialmente una mala dieta y un cuerpo inflamado a causa de una dieta occidental, caracterizada por alimentos procesados, mucha carne y mucho azúcar".

La opinión de este periodista viene respaldada por la de otros expertos como Dariush Mozaffarian, cardiólogo y profesor de medicina en la Facultad de Medicina de Tufts, quien cree que "si tuviéramos una población metabólicamente sana, el Covid sería mucho menos grave”.

Por su parte, el Dr. Robert Lustig, profesor emérito de pediatría de la Universidad de California, señala que comer alimentos de baja calidad puede degradar lentamente la salud, y el Covid urge a mejorar nuestras dietas”. Añade que “sabíamos que los alimentos procesados ​​son peligrosos, pero siempre supusimos que era para enfermedades crónicas. Lo que no sabíamos, hasta esta pandemia, es que las enfermedades crónicas también te preparan para la morbilidad y la mortalidad por enfermedades agudas, como Covid-19”.

Para reducir la inflamación y mejorar la salud metabólica, los expertos recomiendan la Dieta Mediterránea, que ha sido calificada como la "mejor dieta" por US News durante cuatro años seguidos.

Los patrones de alimentación mediterráneos, con alimentos sin procesar tienen un efecto de refuerzo de la inmunidad. Además, el aceite de oliva virgen extra que se consume como parte de la dieta ayuda a combatir la inflamación con grasas monoinsaturadas y altos niveles de antioxidantes y polifenoles.

Asimismo, no es necesario esperar mucho tiempo para ver los beneficios antiinflamatorios de adoptar la Dieta Mediterránea, ya que investigadores de la Universidad de Ohio en su estudio de 2020 apuntaron que los cambios en la dieta pueden producir un "efecto antiinflamatorio rápido, incluso en presencia de patología de la obesidad, e incluso pueden mejorar la eficacia de las vacunas.

Como conclusión, señala la North America Olive Oil Association, la "dieta occidental" o la "dieta estadounidense estándar" pueden contribuir a mayores tasas de hospitalización y mortalidad. La adopción de un patrón de alimentación de Dieta Mediterránea puede revertir esa situación y, por lo tanto, ayudar a mejorar los resultados de Covid, al reducir la inflamación y mejorar las respuestas inmunes.