Desde Bruselas: Nuevas ayudas europeas para los sectores vitivinícola y hortofrutícola

En lo que al impulso del sector primario se refiere, la UE ha jugado un papel fundamental para paliar las consecuencias de la crisis sanitaria

Fecha: 15-Oct-2021

La pandemia que vivimos desde hace año y medio ha causado durante este tiempo retos sin precedentes que han llevado a los gobiernos a adoptar medidas excepcionales para ayudar a sus sectores productivos. En lo que al impulso del sector primario se refiere, la Unión Europea ha jugado un papel fundamental para paliar las consecuencias de la crisis sanitaria. Así, en mayo de 2020 se adoptó un primer paquete de medidas, que se complementaron en julio con un segundo paquete para el sector vitivinícola. Ahora, la Comisión vuelve a adoptar un conjunto de disposiciones como actos de ejecución, que pasarán por un período de control de dos meses por parte del Parlamento Europeo y del Consejo.

Para el sector vitivinícola, las medidas adoptadas consisten en un mayor apoyo a los instrumentos de gestión de riesgos, como los seguros de cosecha y las mutualidades, así como en la prórroga de las medidas de flexibilidad, que ya estaban en vigor hasta octubre de 2022. Los países de la UE podrán seguir modificando sus programas nacionales de ayuda en cualquier momento, cuando normalmente esto solo puede hacerse dos veces al año. Para las actividades de promoción e información, restructuración y reconversión de viñedos, cosecha en verde e inversiones, se prorroga hasta el 15 de octubre de 2022 la posibilidad de conceder una contribución más elevada con cargo al presupuesto de la UE. Por otra parte, la contribución del presupuesto de la UE al seguro de cosecha pasará del 70 al 80% hasta esa fecha. La ayuda de la Unión Europea para sufragar los costes de creación de mutualidades se ha duplicado: del 10%, 8% y 4% en el primer, segundo y tercer año de aplicación, al 20%, 16% y 8%. También se ha concedido una prórroga de flexibilidad a las medidas del programa vitivinícola hasta el 15 de octubre de 2022.

En el sector hortofrutícola, la ayuda a las organizaciones de productores, que suele calcularse en función del valor de la producción, se adaptará para que no sea inferior al 85% del nivel del año pasado. Esta compensación se ofrecerá cuando la reducción de la producción obedezca a desastres naturales, fenómenos climáticos, enfermedades de las plantas o infestaciones parasitarias, escape al control de la organización de productores y la producción sea al menos un 35% inferior a la del año anterior. Además, si los productores demuestran que han adoptado medidas preventivas contra la causa de la reducción de la producción, el valor de producción utilizado para la ayuda será el mismo que el año anterior.

El comisario de AgriculturaJanusz Wojciechowski, declaró que “desde las heladas de primavera y las inundaciones hasta las olas de calor, las condiciones climáticas extremas han sido especialmente difíciles este año para los sectores vitivinícola y hortofrutícola. Esto se produce después de un año ya complicado debido a la crisis provocada por la COVID 19. Estas medidas de apoyo, que resultan muy necesarias, asistirán a los productores de toda la UE en estos tiempos difíciles y se suman a las ya presentadas en 2020 y ampliadas en 2021”.