Gracias a este incremento presupuestario, la inversión consignada por el ministerio para la modernización de estos regadíos superará los 88.058.000 euros (IVA no incluido). Las actuaciones permitirán modernizar un total de 9.610 hectáreas dedicadas principalmente a cultivos de maíz, alfalfa y cereal de invierno y beneficiarán a 1.141 regantes.

El presidente de SEIASA, Francisco Rodríguez Mulero, ha firmado hoy las adendas con los representantes de las comunidades de regantes, en un acto al que han asistido el subdelegado del Gobierno en Huesca, José Carlos Campo; el presidente de la Federación de Comunidades de Regantes de la Cuenca del Ebro, César Trillo, y el presidente de la Comunidad General de Riegos del Alto Aragón, José Antonio Pradas.

Las actuaciones previstas en la Comunidad de Regantes Grañén-Flumen y Almuniente (Huesca) se incluyen en dos proyectos (Fase I y Fases restantes) que pasarán de contar con un presupuesto conjunto de 31.070.000 euros a una inversión de 36.700.000 euros (IVA no incluido), lo que supone un incremento de 5,64 millones de euros.

Los trabajos, que benefician a 450 regantes que cultivan 3.539 hectáreas en los municipios de Grañén y Almuniente, supondrán la modernización integral de la zona regable, con la sustitución del sistema de riego a pie existente actualmente por un sistema de riego a presión.

Se contempla además la ejecución de una completa red de tuberías, balsas de regulación, una estación de bombeo, redes terciarias, acometida eléctrica y un sistema de telecontrol del riego.

El proyecto de modernización de los regadíos de la Comunidad de Regantes de Santa Ana (Huesca), alcanzará los 22.500.000 euros (IVA no incluido), lo que supone un incremento de 2 millones de euros respecto de los 20.420.360 euros fijados en el convenio.

Se completará así la modernización integral de la zona regable, sustituyendo la deteriorada red de acequias y canales por un eficiente sistema de riego a presión mediante tuberías. Se contempla la ejecución de una obra de toma en el Canal de Monegros, una balsa de regulación, una estación de bombeo y dos balsas elevadas. Todo ello se completará con la red de tuberías hasta parcela, un sistema de telecontrol del riego y un parque solar fotovoltaico.

Las obras afectarán a 2.654 hectáreas en los municipios de Almuniente, Senés de Alcubierre, Tardienta, Torralba de Aragón y Torres de Barbúes, y beneficiarán a 273 regantes.

La inversión prevista en la modernización de los regadíos de la Comunidad de Regantes Collarada 1ª Sección (Robres) se incrementará en 5,35 millones de euros, hasta los 26.000.000 euros (IVA no incluido), frente a los 20.650.000 euros fijados en el convenio inicial.

Su objetivo será transformar un deteriorado sistema de riego a manta mediante canaletas de hormigón y acequias en un sistema de riego presurizado a través de tubería enterrada.

Las actuaciones, que beneficiarán a 350 regantes, contemplan dividir la superficie regable de 2.909 hectáreas, distribuidas en los términos municipales de Robres, Almuniente y Senés de Alcubierre, en dos zonas. Cada una contará con una toma en el Canal de Monegros, balsa de regulación, estación de bombeo, otra balsa elevada y dos parques solares fotovoltaicos. La red de tuberías se completará con un sistema de telecontrol.

En el caso del proyecto de modernización de los sectores V, VI y VII de Monegros 2, para la Comunidad de Regantes de Collarada 2ª sección, Montesusín Fase II, la adenda firmada hoy permitirá a la comunidad de regantes acceder a financiación del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER) en el marco del Plan Nacional de Desarrollo Rural (PNDR) 2014-2020. En este caso, la aportación de los regantes se verá rebajada al beneficiarse de 1.345.260,60 euros (IVA no incluido) de fondos europeos.

El objetivo de las obras, que ya están en marcha, es la sustitución del sistema de riego actual por un sistema presurizado en las 508 hectáreas correspondientes a la Fase II. La ejecución de esta actuación supondrá la modernización integral de las 3.126 hectáreas totales de la comunidad.

Las obras incluyen las infraestructuras necesarias para la regulación de caudales, una red de tuberías presurizadas y la mejora de algunos aspectos de la obra ejecutada en la Fase I, como la ampliación de desagües de la red de riego y la instalación de caudalímetros.