UPA y productores de aceituna unidos en guerra

Los agricultores ya no pueden más. Año tras año invierten trabajo, esfuerzo, dinero e ilusiones en la que es su profesión y medio de vida para sus familias y pueblos y que, al final de la campaña de recogida, no sepan el precio que van a percibir por sus cosechas. Pero aún es más intolerable que el precio que estos productores de aceituna de mesa reciben por su producto no llegue a cubrir ni los costes de producción.

Fecha: 04-Sep-2018

Tags: aceituna

Fuente: Euroganaderia

Así, las cifras actuales quedan de la siguiente manera en el sector de la aceituna de mesa: los gastos que asume el agricultor por producir un kilo de aceituna están en torno a 1€, el reducido número de agentes de compra (que unidos deciden los precios unilateralmente) no paga a los agricultores ni los costes de producción. Y, finalmente, el consumidor paga unos 8 euros por un kilo de aceituna transformada en los establecimientos de venta.

Ante este clima insostenible, los agricultores aceituneros de la zona han acudido al llamamiento que UPA les ha hecho, para dar el pistoletazo de salida a una serie de acciones y medidas que se van a llevar a cabo para tratar de revertir la situación. Así, el primer paso será asistir a la concentración que tendrá lugar el día 5 de septiembre en la Puerta de Jerez de Sevilla, para denunciar los hechos y reivindicar unos precios justos. Le seguirán otros actos como una caravana de coches cuya fecha aún está por fijar. Pero, sobre todo, se va a pelear ante las administraciones y los agentes de la cadena agroalimentaria para conseguir mejores precios, Denominaciones de Origen Protegidas, y cuantas justas reivindicaciones tenga el sector productor.

De la multitudinaria participación de este encuentro solo se puede esgrimir la gran preocupación que supone para los productores. Ha intervenido David Gil, Secretario General de UPA-Sevilla, que ha señalado que “cualquier paso que se dé solo servirá de algo si están todos los aceituneros unidos”, y los ha animado a acudir a la concentración del día 5 para reivindicar unos precios justos. También ha participado Francisco Moreno, representando a UPA-Andalucía, que ha insistido en que “a partir de ahora la Organización agraria se pone a disposición de los productores de aceituna de mesa para dar los pasos e iniciar las gestiones necesarias que reclaman y necesitan los agricultores”. También ha intervenido un agricultor veterano que, con sus palabras sencillas, ha ilustrado perfectamente la injusticia y desigualdad que se da en los precios. Finalmente, ha sido el Alcalde de Utrera, José María Villalobos, el encargado de tomar la palabra en la asamblea, volviendo a recalcar que “la solución al problema del bajo precio de la aceituna de mesa depende de que los agricultores estén unidos, y si no es así seguirán jugando con su división”.

Aceituna de mesa

Los aceituneros llevan varias campañas trabajando a pérdidas. De manera que el sector productor se está viendo muy afectado. En esta convocatoria celebrada en el consistorio utrerano, son varios los que han alzado la voz proponiendo que no se venda la aceituna por menos de lo que cuesta producirla, que se destine a aceite e incluso que es preferible dejarla tirada. Pues al problema del bajo precio se unen otros como la existencia de excedentes de la campaña anterior y las dificultades a la exportación a EE.UU. con la injusta subida arancelaria del 34,75% por parte del gobierno de Donald Trump.

España es líder mundial en producción de aceituna de mesa, con más de 440.000 toneladas en la última campaña. Solo Andalucía concentra el 80% de dicha producción. Y si hablamos de territorios, en la provincia de Sevilla se obtiene la mayor parte de la cosecha. Nuestra tierra genera un producto único, con variedades inimitables como la Gordal, y con unas calidades excepcionales. Tenemos un cultivo que proporciona un alimento sano, seguro y de calidad y que beneficia al medio ambiente. Por tanto, sería totalmente desastroso que no se valore y se pierda esta actividad. Si permitimos que este sector tan importante caiga, indudablemente perjudicará de manera catastrófica a la economía de los pueblos aceituneros, cuya empleabilidad y riqueza depende directa e indirectamente de ello.

Y nos centramos en el precio porque es quizá la medida más urgente para poder salvar la campaña que se avecina, pero no hay que olvidar que es necesario un replanteamiento del sector productor. Así, hay que seguir potenciando el envasado, comercialización y distribución de las producciones, para beneficiar al sector primario con el valor añadido. También hay que vertebrar el sector mejorando los canales de comercialización de la aceituna, y crear estructuras que permitan concentrar la oferta para ser más competitivos y poder tener peso en la formación de los precios. Y, por supuesto, seguir apostando por la promoción, investigación e innovación en el sector. Pero, a corto plazo, lo más vital es conseguir un precio razonable para la producción de este año, para poder asegurar la de los años venideros.