Una investigación científica logra acelerar la fotosíntesis en cultivos

Tras más de una década de trabajo, científicos de la Universidad de Ilinois en Estados Unidos y la Universidad de Lancaster en Reino Unido han desarrollado una forma de hacer más eficiente la fotosíntesis en la soja, aumentando los rendimientos un 20 %. El proceso podría repetirse en otros cultivos.

Fecha: 01-Sep-2022

Así lo recoge la publicación estadounidense especializada Olive Oil Times en un artículo firmado por Daniel Dawson, en el que se explica que normalmente las plantas absorben la energía de la luz solar y la convierten en dióxido de carbono, además de utilizar también el agua y los minerales absorbidos del suelo para crear azúcares que generan el crecimiento. Sin embargo, cuando la luz solar es muy intensa, las plantas liberan el exceso de energía en forma de calor para proteger sus células de posibles daños. Este proceso de cambio del llamado ‘modo de crecimiento plenamente productivo’ al ‘modo protector’ dura varios minutos, lo que supone una pérdida natural de eficiencia.

Objetivo, acelerar la fotosíntesis

Al retocar los genes responsables de esta función protectora de la planta, los investigadores pudieron acelerar el proceso, lo que se tradujo en un aumento del 20 % en el rendimiento de las plantas de soja. «Este salto en el rendimiento es enorme en comparación con las mejoras que obtenemos a través del cultivo de plantas. Y el proceso que hemos abordado es universal, así que el hecho de que lo tengamos funcionando en un cultivo alimentario nos da mucha confianza en que esto debería funcionar en el trigo, el maíz y el arroz», comenta Stephen Long, científico agrícola que trabaja en ambas universidades participantes en el trabajo de investigación, añadiendo que la eficiencia de la fotosíntesis en los olivos también podría mejorarse con un método similar aunque, de momento, el principal objetivo de la investigación son los cultivos básicos.

Long avanza que los cultivos con esta nueva mejora en el rendimiento de la fotosíntesis podrían estar creciendo en los campos dentro de diez años, aunque puntualiza que “las leyes relativas a los cultivos modificados genéticamente probablemente afectarían a la rapidez y al lugar en que podrían introducirse estos cultivos”.