El objetivo del mismo ha sido diversificar el sector ganadero en la comarca de Sobrarbe para aumentar la sostenibilidad en todos sus ámbitos. La fórmula planteada es incentivando dichos cultivos alternativos mediante la demostración práctica y la obtención de datos de campo.

Para lograrlo se eligen cultivos que no sólo se adaptan a las condiciones de montaña si no que sacan lo mejor de sí mismos. Además de las condiciones climáticas se tiene en cuenta también la coyuntura agraria de la zona. Los cultivos elegidos han de ser compatibles con una rotación ganadera y/o permitir una rentabilidad aceptable en poca superficie, para permitir así cultivos como segunda actividad para personas ajenas al sector.

¿Por qué se han elegido estos tres cultivos?

La MANZANA expresa, gracias a los cambios de temperatura entre el día y la noche, mejores características cuando es cultivada en la montaña. Mejora su crocantez, su coloración (sobre todo la denominada “chapa”) y el equilibrio de las componentes de su sabor.

Las temperaturas máximas durante el verano se suponen más bajas en zonas de montaña por la altitud. Por otra parte la PATATA tiene problemas para sintetizar almidón cuando el suelo sube de 30˚C. Esta combinación de factores hace que la montaña sea un entorno más adecuado para cultivar patata, pudiendo elegir cultivares de ciclo más largo, y por tanto con más contenido en almidón, que en zonas más bajas. La diferencia entre temperatura diurna y nocturna también favorece la calidad del tubérculo.

Igual que la patata, la JUDÍA, aunque es un cultivo de verano, no soporta bien temperaturas elevadas cuando está en floración, además los sustratos de montaña suelen tener un contenido en sales más moderado, factor que también beneficia a la JUDÍA. Una vez más el gradiente térmico entre día y noche mejora , en este caso la sanidad, del cultivo.

Entre las conclusiones del proyecto destacan las dificultades del manzano que si bien lleva más tiempo siendo probado en Sobrarbe, encuentra algunas dificultades que ralentizan su expansión como el alto coste de la inversión inicial y la necesidad de habilidades y mano de obra especializadas, sobre todo en cultivo intensivo. En cuanto a la judía seca el cultivo ha demostrado expresar una excelente calidad y unas buenas producciones y la compra de la desgranadora por parte de Un Paso Atrás ha mejorado mucho las posibilidades de hacer pequeñas producciones en la zona.

La patata ha sido el cultivo que más ha motivado a los agricultores de la zona, planteándose seguir con su producción tras el fin del proyecto. Es un cultivo, que aunque en la mayoría de ocasiones para consumo propio, todos los agricultores conocen en mayor o menor medid. Es fácil cultivar patata ecológica en el Sobrarbe si se respetan las rotaciones y se fertiliza con material orgánico estabilizado biológicamente.

El informe completo de este proyecto puede verse en: https://www.aragon.es/-/resultados-de-los-grupos-de-cooperacion-de-agentes-del-sector-agrario-convocatoria-2017

Componentes del grupo de cooperación.

BENEFICIARIOS:

• 1Cooperativa Agropecuaria de Sobrarbe (SCLAS)
• Asociación de hortelanos del Sobrarbe ARTO-Un paso Atrás
• Centro de Estudios Rurales y de Agricultura Internacional (CERAI)

RESTO MIEMBROS:

• Sara Nevado
• Fundación para la Conservación del quebrantahuesos
• Ayuntamiento de Aínsa
• Ayuntamiento de Boltaña
• Comarca de Sobrarbe
• Centro de investigación y Tecnología Agroalimentaria  (CITA)
• Centro de Transferencia Agroalimentaria del Gobierno de Aragón