La sostenibilidad, la digitalización y la automatización, claves para la competitividad agrícola

El desarrollo de proyectos de investigación e innovación para el impulso de la sostenibilidad, la digitalización y la automatización del sector agrícola está contribuyendo a la capacidad de las empresas de este ramo a la hora de tomar decisiones más informadas e incrementar su competitividad, según pone de relieve el centro tecnológico Eurecat con motivo del Día Mundial de la Agricultura, que se celebraba ayer, 9 de septiembre.

Fecha: 13-Sep-2022

Actualmente, “la competitividad está caracterizada por el conocimiento aplicado y el desarrollo de soluciones innovadoras basadas en tecnologías disruptivas”, explica el director de Desarrollo Cientificotecnológico de Eurecat, Gabriel Anzaldi. Desde su punto de vista, “inevitablemente, la convergencia de múltiples tecnologías facilitadoras, entre las que se encuentran la inteligencia artificial, las ciencias sociales y ambientales, la biotecnología, la automatización y la robótica agraria, entre muchas otras, se hace imprescindible para afrontar los desafíos complejos a los que nos estamos enfrentando en el sector”.

En este contexto, “Eurecat, trabaja en la hibridación de estas múltiples tecnologías desde la perspectiva de ofrecer nuevas oportunidades a las empresas agrícolas para hacer frente a sus desafíos en materia de eficiencia, calidad y productividad, así como en el ámbito de la sostenibilidad, contribuyendo a desarrollar un ecosistema participativo y sin restricciones en torno al sector alimentario, pero también teniendo en cuenta su estrecha relación con otros sectores”, resalta Gabriel Anzaldi.

Estas tecnologías “contribuyen a la mejora de la actividad agrícola, a fin de que pueda afrontar los retos que tiene por delante y que abarcan desde la valorización de la calidad de los productos y su contribución a la economía circular, así como las etapas posteriores de la cadena de valor, optimizando el uso de los recursos agrícolas”, además de “asegurar su trazabilidad y comunicarla adecuadamente al consumidor y ser muy eficiente en toda la cadena de valor de producción, transformación y distribución de un sector de carácter estratégico para la economía”, añade el responsable de Negocio de Alimentación de Eurecat, Ignasi Papell.

Un ejemplo en esta línea es el proyecto SCORPION, en el que Eurecat participa en el desarrollo de robots autónomos modulares que agregan valor a pequeñas máquinas agrícolas gracias a la automatización y optimización de tareas de pulverización, utilizando métodos ecológicos innovadores, reduciendo costos de inactividad, la compactación del suelo y la exposición humana a productos químicos.
 
En palabras del director de la unidad de Robótica y Automatización de Eurecat, Daniel Serrano, “el diseño modular utilizado por el proyecto considera la escalabilidad de funciones y permite a los robots realizar tareas como poda y cosecha, sin dejar de ser compatible con los estándares de interoperabilidad en la agricultura”. Eurecat desarrolla e integra algoritmos del estado del arte en localización y mapeo autónomos adaptados a terrenos variables y no estructurados. El consorcio, que está coordinado por el Centro de Ciencia y Tecnología de INESC, cuenta con la participación de 11 socios de 4 países europeos diferentes.

Dentro de agROBOfood, una red europea de Digital Innovation Hubs orientada a impulsar y acelerar la adopción efectiva de tecnologías robóticas y de inteligencia artificial en el sector agroalimentario, Eurecat es el responsable de la iniciativa a nivel estatal y actúa como mentor de las pequeñas y medianas empresas que reciben financiación de proyectos de alto valor tecnológico a través de las convocatorias (OpenCalls) del proyecto.

En este apartado, destaca también el consorcio VitiGEOSS, coordinado por Eurecat y financiado por el programa Horizon 2020 de la Unión Europea. La unidad de Inteligencia Artificial Aplicada de Eurecat lidera y participa de distintas actividades alrededor de la analítica de datos satelitales y de sensores instalados en el campo y en la maquinaria, a fin de “desplegar nuevos servicios de prescripción agronómica, optimización de recursos y cálculo de indicadores para la mejora en la gestión de explotaciones vitivinícolas, facilitando la gestión del riego, la fertilización, el control de plagas y la sostenibilidad”, detalla el director de la unidad de Inteligencia Artificial Aplicada del centro tecnológico, Xavier Domingo.

Soluciones robóticas agrícolas para proteger los cultivos

Para abordar y resolver los retos organizativos y tecnológicos, asociados a la adopción generalizada de la agricultura robotizada, Robs4Crops se basa en la maquinaria agrícola, las normas y las mejores prácticas ya existentes, a fin de diseñar y proporcionar un sistema totalmente autónomo preparado para pruebas comerciales a gran escala. En este sentido, “Robs4Crops demuestra que la robótica puede aportar precisión a una serie de tareas repetitivas, reduciendo así la necesidad de que los profesionales se involucren en trabajos desagradables o poco saludables”, remarca el director de la Unidad de Robótica y Automatización de Eurecat.

La nueva solución de cultivo robotizada llevada a cabo dentro del proyecto se demostrará a escala piloto en cuatro países europeos y consta de tres elementos principales: herramientas inteligentes, vehículos autónomos y el controlador de cultivo. El consorcio que lo lleva adelante cuenta con la participación de la Unidad de Robótica y Automatización de Eurecat, junto con un consorcio de 15 socios de 8 países europeos, coordinado por Wageningen University & Research.

El desarrollo de un robot autónomo, equipado con un manipulador móvil destinado a distribuir dispensadores de feromonas para el biocontrol de plagas de insectos en los viñedos de forma automática es el resultado del proyecto europeo Grape, financiado por la Comisión Europea dentro del proyecto Echord ++. Eurecat ha contribuido a la creación de esta plataforma, que también hace posible el control del estado de salud del cultivo, mediante varios sensores para recoger imágenes y otros datos de la planta, como el color de las hojas y de la uva o el índice de vegetación.

Otra área de actividad en auge es la valorización de subproductos vegetales, así como de mejora de la explotación agrícola, tal como lo acreditan proyectos como PREDIVI, que tiene como objetivo mejorar la toma de decisiones relacionadas con las cosechas vitivinícolas a través del Big Data.

Ecosistema agroalimentario y transferencia de conocimiento

En este nuevo aniversario del Día Mundial de la agricultura, “es importante también reforzar una perspectiva en la que el ecosistema agroalimentario sea capaz de aplicar el conocimiento y transferirlo con rapidez a las cadenas de producción, hacerlo bajo la visión de acceso abierto a los adelantos tecnológicos y abarcando todo el tejido socioeconómico del sector”, subraya el director de Desarrollo Cientificotecnológico de Eurecat.

En este sentido, “cogenerar, aplicar los resultados de la investigación y pasar del piloto a la escala preindustrial son aspectos trascendentes para el éxito del proceso de diferenciación tecnológica agroalimentaria y desde Eurecat buscamos contribuir en este sentido”, concluye Gabriel Anzaldi.