La industria presenta su propuesta de etiquetado nutricional

Cinco compañías (Mondelez International, Nestlé, PepsiCo, The Coca-Cola Company y Unilever) han presentado su sistema de etiquetado nutricional evolucionado (ENL, por sus siglas en inglés), que tiene como objetivo ofrecer al consumidor una información nutricional completa y sencilla y que se basa en colores y porciones.

Fecha: 09-Nov-2018

 Los encargados de detallar el ENL han sido Ricardo Hernández, Director de Comunicación Corporativa y RRII de Mondelēz; Alberto Vega, Director de Relaciones Institucionales de Nestlé; Marta Puyuelo, Directora de Relaciones Institucionales y Comunicación de PepsiCo; Juan José Litrán, Director de Relaciones Corporativas de Coca-Cola Iberia; y Ana Palencia, Directora de Comunicación Corporativa y Sostenibilidad de Unilever.

Estos expertos han explicado que el etiquetado nutricional evolucionado deriva del sistema CDO (Cantidades Diarias Orientativas), que cuenta con mayor implantación en productos de alimentación en toda Europa. Incorpora un código de colores (rojo, amarillo y verde) y toma en consideración los cuatro nutrientes más relevantes para los consumidores: grasas, grasas saturadas, azúcares y sal. En este sentido, Marta Puyuelo, de PepsiCo, ha señalado que "los colores informan al consumidor de forma sencilla de un alto, medio o bajo contenido en un nutriente exacto".

La otra clave del ENL es que utiliza la porción como la mejor unidad de medida para que el consumidor pueda entender el porcentaje de nutrientes que está consumiendo realmente y no sobre 100 gramos o mililitros del producto.

Juan José Litrán, de Coca-Cola, ha afirmado que "además de interpretarse fácilmente, el ENL permite una elección más consciente e informada gracias, por un lado, a la posibilidad de conocer la cantidad de nutrientes que se consumen, tomando como unidad de medida porciones realistas y, por otro lado, gracias a un sistema de colores que valora el porcentaje de nutrientes más relevantes para los consumidores".

Para apoyar esta afirmación, las cinco compañías han dado a conocer los resultados de una encuesta a 3.500 consumidores de siete países (Bélgica, Alemania, Italia, Polonia, Grecia, Portugal y España) de la que se desprende, entre otras conclusiones, que 8 de cada 10 europeos encuentran el sistema de etiquetado nutricional ENL más sencillo y completo en el momento de la compra.

Respecto al uso de colores, la encuesta revela que la mayor parte de los consumidores europeos consideran más sencillo leer un etiquetado nutricional con colores: el 93% la prefiere, frente a la monocromática actual.

Y en cuanto a tomar la porción como unidad de medida, de la encuesta realizada se desprende que, en 6 de los 7 países consultados, la mayoría de los consumidores prefieren el sistema por porciones frente al sistema que emplea los 100 gr o 100 ml.

Los representantes de las cinco compañías han abogado por la necesidad de disponer de un sistema de porción armonizado a nivel europeo para todos los productos. Alberto Vega, de Nestlé, ha asegurado que los promotores del ENL "han impulsado la obtención de tamaños de porción real de consumo en 11 categorías de producto en el ámbito europeo".

Para ello, un comité de científicos independientes de cinco universidades europeas trabajó en la definición de los tamaños de porción real de estas 11 categorías (cereales de desayuno, pasteles, queso, chocolate, helado, margarina, mayones, snacks salados, golosinas, cremas para untar/confituras y galletas dulces).

Ricardo Hernández, de Mondelēz, ha añadido que se basaron en datos de la encuesta NANS (National Adult Nutrition Survey) realizada en Irlanda en 2011, en la que 1.500 personas registraron la cantidad y tipo de comidas y bebidas ingeridas durante cuatro días. También recurrieron al estudio Food4me, realizado entre 2011 y 2015 en Irlanda, Reino Unido, Holanda, Polonia, España, Alemania y Grecia que analizaba la frecuencia de la ingesta de 1.480 consumidores y el tamaño de la porción de 156 alimentos.

Para finalizar, Ana Palencia, de Unilever, ha mencionado que otra ventaja del ENL es que "incentiva a las empresas a seguir realizando reformulaciones, reduciendo azúcares o grasas, para mejorar el perfil nutricional de los productos". Asimismo, ha hecho hincapié en que "cumple con la normativa de la UE, tanto del Reglamento que establece las ingestas de referencia, como el Reglamento que indica los índices para calificar el 'bajo contenido en' de cada uno de los nutrientes señalados".

El objetivo es probar este sistema y recoger resultados en 2020, para contribuir al debate sobre "un sistema de etiquetado nutricional único, coherente y significativo en toda Europa".