El subsecretario de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Jaime Haddad, ha subrayado hoy que el Proyecto de Presupuesto para 2018 permitirá atender con suficiencia todas las necesidades presentes y futuras que a lo largo del año pueda demandar el sector agroalimentario, pesquero y medioambiental.

En su comparecencia hoy en la Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente del Congreso de los Diputados para explicar las líneas básicas del Proyecto de Presupuestos para 2018, Haddad ha destacado su carácter social, que se corresponde con los objetivos básicos de los Presupuestos Generales del Estado, orientados a apoyar el crecimiento económico y a creación de empleo; promover un crecimiento inclusivo, favoreciendo a las capas más vulnerables de la sociedad y devolver a los empleados públicos parte de los esfuerzos realizados en la época de crisis.

PRESUPUESTO CONSOLIDADO

Así, ha señalado el subsecretario, el Proyecto de Presupuestos consolidado para el ejercicio 2018 del Departamento y sus organismos autónomos y Agencia Estatal de Meteorología, asciende a 9.649 millones de euros, lo que supone un aumento del 1,78% con respecto a 2017, en línea con el crecimiento de la economía española.

De esta cifra, la parte destinada al Subsector Estado alcanza un montante de 1.377 millones de euros, mientras que a Organismos Autónomos y Agencia Estatal de Meteorología se destinarán 8.272 millones de euros del presupuesto consolidado.

 Unos presupuestos, ha resaltado el subsecretario, que tienen como patrón común el crecimiento equilibrado y sostenible, que se reproduce en la práctica totalidad de los capítulos, de los que ha destacado el esfuerzo inversor de la política de infraestructuras, que crece un 3,6%, así como el apoyo a la Política de Seguros Agrarios.

 PRINCIPALES CIFRAS DEL PRESUPUESTO

 En su exposición sobre las grandes líneas de las políticas de gasto del Departamento, Haddad ha destacado la política de “Agricultura, Pesca y Alimentación”, que se eleva a 7.463,11 millones de euros, excluidos gastos de personal, un 1,33% más que en 2017. En este ámbito ha resaltado la política de regulación de mercados, dotada con 5.800 millones de euros, y el programa destinado al desarrollo rural con 1.230 millones de euros.

 

En cuanto a la política de “Infraestructuras”, ha subrayado el incremento del presupuesto, superior al 3,4%, lo que eleva esta partida a 1.617,73 millones de euros. En éste capítulo ha destacado el programa de gestión e Infraestructuras del agua, con un incremento del 2,06%, situándose en 1.030 millones de euros, y el programa destinado al control y mejora de la calidad del agua dotado con 173,21 millones de euros, así como los 83,5 millones de euros destinados a la lucha contra los incendios forestales y los 17 millones de euros que se dedican a las acciones de restauración hidrológica forestal.

 

PARTIDAS QUE GESTIONA LA SUBSECRETARÍA

 En lo referente a las partidas que gestiona de manera directa la Subsecretaría, Jaime Haddad ha apuntado que se ha conseguido reducir el gasto corriente gracias al impulso racionalizador aplicado desde 2011, y al esfuerzo realizado para lograr una mayor eficiencia y eficacia en la gestión, manteniéndose así unas cifras continuistas en el subsector estado.

 También ha destacado el incremento del presupuesto para las transferencias corrientes a Organismos Internacionales, a las que se asignan 4,1 millones de euros, lo que supone una subida de 714.470 euros, permitiendo reforzar la posición española en la escena internacional.

 

Por otra parte, y en relación con las transferencias de capital, el subsecretario ha destacado el incremento de la partida que permite apoyar la financiación del sector agrario para hacer frente a situaciones adversas, especialmente las derivadas de la climatología, recogiendo también la posibilidad de atender a otros daños que pudieran producirse como epizootias o alzas desmesuradas de costes de producción. Esta partida, ha explicado Haddad, que para 2018 cuenta con 5,7 millones de euros, se ha incrementado en 2,5 millones con respecto a 2017, lo que permite dar continuidad y potenciar las líneas de apoyo a la financiación del Ministerio, destinadas a paliar los efectos de la sequía y otras causas extraordinarias.

 

SEGUROS AGRARIOS

 En relación con la gestión de riesgos que el Ministerio lleva a cabo, desde hace ahora 40 años, a través del Sistema Español de Seguros Agrarios Combinados, el subsecretario ha recordado que en la actualidad cubre la totalidad de las producciones agrícolas, ganaderas, forestales y acuícolas, habiéndose convertido en un referente a nivel internacional en la gestión de riesgos agrarios, y en un elemento clave en la política del Departamento.

 Así, la dotación establecida para atender las subvenciones previstas en el Trigésimo Noveno Plan de Seguros Agrarios Combinados alcanza la cantidad de 211,27 millones de euros, ampliable, lo que representa una subvención media del 28,84 por ciento respecto del coste total previsible. De esta forma, ha explicado Haddad, el importe de la aportación global del Estado, representado por la dotación presupuestaria que se concede a ENESA, asciende a un total de 216,43 millones de euros.

 Para el Gobierno, ha añadido el subsecretario, las subvenciones al Seguro Agrario constituyen una de las formas más eficientes de emplear los recursos presupuestarios, ya que su carácter público-privado les confiere un efecto multiplicador y, por cada euro de dinero público que invierte la Administración General del Estado en subvencionar el Seguro Agrario, los agricultores reciben indemnizaciones por valor de 2,3 euros.

 De esta manera, ha señalado que los datos provisionales de niveles de aseguramiento al inicio de 2018, son positivos y apuntan que se superará el capital asegurado el pasado año, lo q ue demuestra la buena salud del sistema y la efectividad del apoyo público.

 En este sentido ha manifestado que no se escatimarán esfuerzos, ni presupuestarios, ni técnicos, ya que el seguro agrario complementa de forma eficaz las medidas de sostenimiento de rentas de la PAC, aportando un significativo valor añadido al sector agrario.