Investigan los efectos del uso restrictivo y eficiente del agua en el viñedo

La Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha está impulsando en el Centro de Investigación de la Vid y el Vino de Castilla-La Mancha (IVICAM) la investigación en el campo de la viticultura, en una región que es líder en superficie y producción, con el objetivo de evaluar los efectos del cambio climático en el crecimiento y desarrollo de la vid, así como su adaptación a las nuevas condiciones ambientales.

Fecha: 06-Aug-2021

En las instalaciones de Tomelloso (Ciudad Real) se ha procedido a la plantación de una nueva parcela experimental de vid, que se suma a las tres ya en funcionamiento. En este caso, el objetivo pasa por mitigar el impacto negativo del cambio climático en el crecimiento y desarrollo de la vid, así como en la calidad de la uva, con las miras puestas en los posibles ajustes necesarios en la viticultura del futuro.

La parcela experimental servirá para ver los efectos del uso restrictivo y eficiente del agua en el viñedo, de tal manera que se mejorará el rendimiento productivo utilizando de forma muy eficiente el agua.

Para ello, se identificarán los genotipos mejor adaptados a las nuevas condiciones ambientales, para también hacer frente a la sequía, buscando las variedades más eficientes desde el punto de vista hídrico o que mejor se ajusten agronómicamente a la viticultura de Castilla-La Mancha.

De esta forma, en la investigación se incluyen un pequeño grupo de patrones, que pudieran contribuir a la adaptación vegetal, mejorándola.

La nueva parcela de 1,8 hectáreas cuenta con hasta 24 variedades, la mitad de blanca y la otra mitad de tinta, y cinco patrones, resistentes a la sequía y a elevadas concentraciones de caliza activa en el suelo, con una media de 1.815 cepas por hectárea. En esta parcela, se van a llevar a cabo en los próximos años estrategias de riego deficitario controlado o de secado parcial de raíces, dentro de la línea de investigación.