Extracto de tomate rojo revierte la inflamación de la próstata y reduce la metástasis del cáncer

Lo ha descubierto un grupo de investigadores mexicanos, que observaron que el extracto lipídico de tomate rojo revierte la Hiperplasia Prostática Benigna (HPB) o agrandamiento de la próstata y que además de la reducción del crecimiento del órgano también regenera la microarquitectura celular de la próstata, disminuyendo los marcadores de estrés oxidativo y normalizando la presión arterial. Sobre el extracto se han realizado numerosos estudios por sus efectos anticancerígenos, entre los que figura la disminución de la metástasis en cáncer de próstata.

Fecha: 29-Aug-2017

Fuente: HortoInfo

Un grupo de investigadores del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) de México ha descubierto que el extracto lipídico de tomate rojo revierte la Hiperplasia Prostática Benigna (HPB) o agrandamiento de la próstata, informó este jueves el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), según ha podido saber Hortoinfo de fuentes del citado organismo.

La hiperplasia es un padecimiento que se presenta en la mayoría de los hombres mayores de 40 años y es una afección con una prevalencia muy alta a nivel mundial; el trastorno se exacerbada en personas con obesidad y si sus síntomas no se atiende adecuadamente, en algunos casos puede requerir intervención quirúrgica.

La inflamación prostática está relacionada con una serie de alteraciones celulares, que entre otros efectos provoca el crecimiento de esta glándula, presionando la uretra, conducto por el cual se evacua la orina de la vejiga y origina su obstrucción, lo que provoca síntomas como: retención urinaria, dificultad o dolor durante la micción y sensación repetida de querer orinar sin lograrlo.
Valentín Correa López, miembro del equipo de investigación del Departamento de Farmacobiología del Cinvestav, señala que “administramos durante tres meses un extracto lipídico del tomate rojo por vía intragástrica a un grupo de ratas a las cuales se les indujo Hiperplasia Prostática Benigna (HPB) y se observó su capacidad para reducir la inflamación y el crecimiento de este órgano.”

Los investigadores observaron también una capacidad de regeneración la microarquitectura celular de la próstata, una disminución de los marcadores de estrés oxidativo, la normalización de la presión arterial y la reducción de las concentraciones plasmáticas de lípidos y glucosa.

Este extracto lipídico de tomate entre otras sustancias nutritivas contiene licopeno, un carotenoide que tiene un potente efecto antioxidante y que ha sido ampliamente estudiado por sus efectos anticancerígenos, entre los que figura la disminución de la metástasis en cáncer de próstata y reducción en las neoplasias malignas.

Los resultados de la investigación se presentaron en un congreso internacional, llamando la atención de urólogos del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y de Nutrición “Salvador Zubirán”, quienes se propusieron probar dicho extracto en pacientes con HPB, lo que permitió establecer un vínculo de colaboración científica con el Cinvestav.

“Actualmente los efectos benéficos del extracto en pacientes se encuentra en evaluación; se han analizado 30 pacientes, 15 que reciben el tratamiento y el resto, placebo; al comparar los grupos preliminarmente se han obtenido diferencias significativas. Lo importante de esta investigación es que ya se encuentra en fase II. En un futuro se tendrán los resultados definitivos con 120 pacientes”, ha indicado Correa López.

La ventaja de utilizar el extracto de tomate ya procesado y estandarizado es que se puede regular la dosis de manera adecuada para obtener sus propiedades benéficas.