El uso de esas plantas naturales locales redujo las tasas de infestación de las colonias de abejas. El romero y el laurel fueron los más efectivos; sin embargo, la menta verde exhibió la menor actividad acaracida contra el Varroa destructor.

Sugerimos que las plantas examinadas en nuestro estudio parecen tener un potencial prometedor como alternativa al uso de productos químicos para controlar los ácaros de la varroa y que pueden ser útiles para mantener tasas más bajas de infestación de ácaros en las colmenas. Este método puede ser utilizado por apicultores individuales como tratamiento práctico. Por lo tanto, se necesitan más estudios de campo y de laboratorio probando los aceites esenciales de estos para determinar sus componentes para una mejor evaluación.