El proyecto Oceánide de Aimplas desarrolla envases monouso para productos cárnicos untables a base de algas o almidón

Permitiría no tener que pagar el impuesto al plástico

Fecha: 06-Jun-2023

Fuente: Eurocarne

A consecuencia de las nuevas legislaciones vigentes o que entrarán en vigor sobre los plásticos de un solo uso y de la demanda social de generar un menor impacto medioambiental, Aimplas sigue apostando por el desarrollo de nuevos materiales de fuente renovable que permitan la reducción del uso del plástico convencional para producir envases más sostenibles y reducir los residuos plásticos. 

Un ejemplo es el proyecto Oceánide, financiado por la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI), que consiste en el desarrollo de nuevos envases monouso aceptados por la nueva legislación y exentos del nuevo impuesto al plástico, a partir de algas, almidón, gelatina de pescado o proteína de la leche.

En concreto, a partir de estos polímeros naturales, en muchos casos subproductos de diferentes industrias, se producirán por tecnologías convencionales, como el moldeo por inyección, tarrinas para helados, embutidos untables y quesos para su uso en heladerías y charcuterías.

Nuria López, investigadora de envasado de Aimplas y líder del proyecto, ha explicado que “los envases plásticos de un solo uso como los que se emplean en heladerías o charcuterías son susceptibles de la legislación SUP, en la que se prohíbe el uso de envases fabricados con materiales plásticos, independiente de cuál sea su naturaleza o fin de vida. La alternativa de usar polímeros naturales, modificados físicamente, gana terreno en estas aplicaciones. Son aceptados por la directiva SUP y no se incluyen en el pago de impuestos, ya que no son considerados plásticos por la legislación”. 

El uso de estos envases con bioplásticos facilita que las empresas puedan adaptarse a las nuevas demandas de la sociedad y las nuevas demandas legislativas. "En el proyecto Oceánide estamos combinando polímeros naturales de diferente origen que proporcionen una gran variedad de opciones fácilmente industrializables para heladerías y charcuterías”, señala López.

Los envases a desarrollar en el proyecto serán fabricados con mezclas de agar (sustancia que se obtiene de algunas especies de algas), almidón de maíz o patata, gelatina de pescado o caseína de la leche, materias primas de fuente renovable y fácilmente degradables, lo que reduce los impactos asociados al fin de vida del envase. Aimplas proporcionará a los compuestos diferentes propiedades, como viscosidad, resistencia térmica, resistencia mecánica o aptitud para estar en contacto con helados, embutidos untables y quesos con requerimientos de resistencia a grasas o congelación.  

Aimplas lidera esta investigación en la que también participan la Universitat de València (UV) y Almuplas. Desarrollará los nuevos compuestos basados en polímeros naturales, que serán desarrollados a escala laboratorio y planta piloto, para que luego Almuplas valide los materiales en planta industrial y obtenga envases inyectados para diferentes productos.

Por otro lado, la UV validará los desarrollos obtenidos en el proyecto para estudiar la compatibilidad de los desarrollos plásticos en contacto con alimentos.

El proyecto cuenta, además, con el apoyo de la empresa Nutrinovex, usuaria de envases monouso para alimentos energéticos.