El papel de la gastronomía en el desarrollo de la agenda 2030

La gastronomía juega un papel estratégico como motor de desarrollo sostenible, a la vez que impacta a los diferentes Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) marcados por la ONU en 2015 en la Agenda 2030 para dar continuidad a la agenda de desarrollo tras los Objetivos de Desarrollo del Milenio.

Fecha: 16-Mar-2020

Tags: gastronomía

Así figura en los avances del Informe sobre la contribución de la gastronomía a la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible realizado por Basque Culinary Center y la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB) y que han sido presentados en la Reunión de la Cumbre Iberoamericana de ministros de turismo celebrada esta semana en Andorra, un encuentro entre autoridades de Turismo de diecisiete países de Iberoamérica para acordar un fuerte impulso al turismo como motor importante de desarrollo sostenible en la región.

Se trata del primer encuentro de ministros/as de Turismo de Iberoamérica tras una década donde se ha acordado una Declaración en la que se aprueban las Líneas estratégicas sobre turismo y desarrollo sostenible, las cuales serán presentadas a los Jefes de Estado y de Gobierno durante la XXVII Cumbre Iberoamericana que se celebrará en Andorra en noviembre de 2020, con el lema Innovación para el Desarrollo Sostenible – Objetivo 2030.

Gastronomía y Agenda 2030

El informe refuerza el rol estratégico que la gastronomía tiene como motor de desarrollo sostenible y de qué manera la gastronomía impacta a los diferentes objetivos de desarrollo sostenible (ODS) marcados por la ONU en la agenda 2030. El documento se está planteando por áreas temáticas que contendrán contenidos de contexto y técnicos relacionados con la gastronomía y los ODS, y se identificarán actores relevantes, experiencias exitosas y buenas prácticas en cada área. El trabajo concluirá con una serie de recomendaciones orientadas hacia el futuro. Asimismo, para reforzar la divulgación del informe se diseñarán una serie de materiales innovadores y digitales.

“La fuerza con la que aparece el amplio ecosistema gastronómico en sectores como el empleo, el comercio, la agricultura, la pesca, la cultura, el medio ambiente y por supuesto el turismo, hacen que esta gran riqueza de nuestra región que son sus recetas, sus productos y las millones de personas que viven de alguno de estos sectores productivos, sean también objeto de trabajo en la Cumbre Iberoamericana de Andorra” explica Rebeca Grynspan, Secretaria General Iberoamericana.

Por su parte, el director general de Basque Culinary Center, Joxe Mari Aizega, destacaba que “la gastronomía conforma una cadena de valor que genera una contribución a nivel cultural, social, económica y medioambiental. Desde está visión multisectorial podemos promover un desarrollo sostenible en la producción, transformación, la hospitalidad o el turismo. Una contribución directa en el desarrollo y evolución de los diferentes territorios”.