El 1 de diciembre en la EPS de Huesca tuvo lugar la ponencia "El suelo en los ecoesquemas de la nueva PAC", impartida por José María Salamero Esteban, Director General de Producción Agraria del Gobierno de Aragón. Presentada por María Videgain Marco, ingeniera agrónoma, investigadora en la EPSH y vocal del Colegio y coordinada por David Badía Villas, catedrático del Área de Edafología y Química Agrícola en la EPSH.

Los días 13 y 15 de diciembre tendrán lugar las dos próximas jornadas "El suelo y su potencial para mitigar el cambio climático" en Euskadi y "La gestión adaptativa del suelo al cambio climático en Navarra: Proyecto LIFE-IP NAdapta-CC". "La salinidad en el suelo. Problemática en Navarra". en Navarra, que podrán seguirse online. (Enlace Información completa a las jornadas)

La charla impartida por José María Salamero fue seguida por más 90 personas, en modalidad online mediante videoconferencia y presencial desde el Salón de Actos de la Escuela donde acudieron profesoras y profesores expertos en edafología, investigadoras e investigadores, estudiantes, así como profesionales interesadas/os en esta jornada.

José María Salamero explicó esta nueva figura que introduce la última reforma de la PAC. Este modelo de condicionalidad reforzada más exigente que la actual condicionalidad, introduce los ecoesquemas como una herramienta para fomentar prácticas agronómicas más sostenibles y que contribuyan a la conservación y recuperación de los suelos. La agricultura baja en carbono y la agroecología centran las siete prácticas sostenibles de los ecoesquemas.

Las y los productores deberán llevar una gestión sostenible de insumos, lo que implica utilizar una herramienta reconocida por la comunidad autónoma para la gestión del agua de riego, disponer de un plan de abonado elaborado por una o un técnico y registrar en un cuaderno de explotación electrónico la aplicación de fertilizantes y fitosanitarios.

El sistema agrícola y alimentario europeo, apoyado por la política agrícola común, ya es una norma mundial en términos de seguridad, seguridad del suministro, nutrición y calidad. Ahora debe también convertirse en la norma mundial de sostenibilidad. La transición hacia un sistema alimentario sostenible puede aportar beneficios medioambientales, sanitarios y sociales, así como ofrecer unos beneficios económicos más justos. La recuperación de la pandemia nos situará en una senda sostenible. (Comisión europea)