ALIMENTE 21: el proyecto para aplicar Inteligencia Artificial a la industria alimentaria

Un consorcio de siete empresas encabezado por Raventós Codorníu ha puesto en marcha este proyecto que cuenta con un presupuesto de 5,1 millones de euros y ha sido dotado con tres millones en ayudas procedentes de los Fondos Next Generation.

Fecha: 09-Mar-2022

Fuente: Foodretail

Un consorcio de siete empresas encabezado por Raventós Codorníu ha puesto en marcha un proyecto para aplicar la Inteligencia Artificial (IA) a los procesos de producción de la industria alimentaria. Se trata de ALIMENTE 21 – Industria alimentaria inteligente del siglo XXI, que tiene como principal objetivo incrementar la eficiencia de la gestión industrial en el sector alimentario, aumentar su calidad y seguridad y reducir su impacto ambiental (consumo energético e hídrico) aplicando nuevas tecnologías, principalmente la IA.

ALIMENTE 21 cuenta con un presupuesto de 5,1 millones de euros y con una ayuda de más de tres millones. Está subvencionado por el CDTI (Centro para el Desarrollo Tecnológico e Industrial) con el apoyo del Ministerio de Ciencia e Innovación y cofinanciado por los Fondos Europeos Next Generation. Se trata del único proyecto de alimentación aprobado en la convocatoria 2021 del programa estatal 'Misiones, Ciencia e Innovación'.

La iniciativa, que acaba de empezar y finaliza en 2024, la realizan de forma consorciada tres compañías del sector alimentario (Codorníu y las cárnicas Aldelís y Prolongo) y cuatro ingenierías o proveedores tecnológicos: Mapex, Omron Iberia, Cibernos y Agropixel. Además, cuenta con la colaboración y coordinación técnica del centro tecnológico Eurecat.

El centro tecnológico Eurecat trabajará con soluciones punteras para avanzar hacia un modelo de gestión de la industria alimentaria inteligente y con menor impacto ambiental

En concreto, Eurecat trabajará con las empresas en la investigación y desarrollo de soluciones punteras basadas en Inteligencia Artificial, Big Data, Edge Computing, Digital Twin y otras, con el objetivo de hacer avanzar a la industria alimentaria hacia un modelo de gestión predictiva (se avanza a lo que sucederá), prescriptiva (sugiere qué hay que hacer), inteligente y con menor impacto ambiental, desde el punto de vista del uso del agua y la energía, principalmente.

HACIA LA INDUSTRIA 4.0

Codorníu, que en este proyecto cuenta con la ayuda del centro tecnológico de la Universitat Politécnica de Catalunya, avanza, desde hace años, hacia la industria 4.0, que aprovecha tecnologías como la Inteligencia Artificial para ganar eficiencia y competitividad.

El objetivo de esta compañía es optimizar todos los procesos (desde la viña a la expedición de la botella): mejorar la toma de decisiones (gracias a la monitorización de viñas o de la línea de producción); ser más sostenibles reduciendo consumos energéticos y de agua; mejorar la innovación de sus cavas, etc. 

Por su parte, Grupo Cibernos participa en este proyecto diseñando y desarrollando modelos de Deep Learning y Reinforcement Learning para la predicción de demanda de materias primas. Se utilizarán datos de otros sistemas y de sensores IoT para desarrollar escenarios predictivos y prescriptivos orientados a mejorar la producción de forma más sostenible en el sector agroalimentario.

Por su parte, Aldelís contará con el apoyo de los centros tecnológicos Eurecat y Ainia para alcanzar los objetivos establecidos en el proyecto: reducir el consumo energético e hídrico de su actividad productiva a través de la optimización de los parámetros de sus procesos.

TECNÓLOGOS TRABAJANDO PARA LA INDUSTRIA ALIMENTARIA

A su vez, OMRON diseñará y pondrá en marcha las soluciones basadas en Inteligencia Artificial en colaboración con Eurecat y la Universidad de Alcalá de Henares. Los objetivos del uso de estas tecnologías son mejorar la calidad en el mercado de la alimentación, reducir desperdicios de envases y alimentos, reducir los consumos de agua y mejorar la eficiencia y disponibilidad de las líneas de fabricación donde se embarcarán estas soluciones.

Por su parte, Prolongo aplicará una batería de tecnologías de Inteligencia Artificial para la mejora de la productividad y la sostenibilidad de sus procesos, así como para incrementar el nivel de seguridad alimentaria en sus operaciones.

Mapex se centrará en investigar los retos más complejos a los que se enfrenta la industria alimentaria del futuro desde el punto vista de la captura y la explotación de la información. La compañía empleará Inteligencia Artificial y Big Data para proporcionar a los fabricantes predictibilidad y anticipación sobre sus procesos productivos, dotando de capacidades avanzadas a sus sistemas de gestión de plantas industriales.

Finalmente, Agropíxel es una spin off tecnológica del grupo Raventós Codorníu que presta servicios tecnológicos basados en técnicas de agricultura de precisión y en sensórica avanzada e inteligencia artificial para bodegas. En ALIMENTE 21 actuará obteniendo todos los datos sobre la llegada de la uva en la bodega y participará en la instalación de sensores avanzados y el uso de inteligencia artificial para reducir el consumo de energía y agua.